El proyecto Arena nace de las ganas de ayudar y en la ilusión de creer que si todos aportamos un granito de arena podremos cambiar el mundo.

Todo surge cuando Andrea Garcia, una chica a la que le hace feliz ayudar y lleva años haciendo voluntariado por la zona en la que vive, decide hacer un voluntariado en otro continente.

Andrea quería ir a la isla Mfangano y poder aportar el máximo de ella, es por ello que ha querido utilizar todos los medios que están a su alcance para poder conseguir a los niños de la Asociación Índigo todas las cosas necesarias para su día a día, como una instalación de agua, unas mosquiteras, libros, entre otros.
Es en ese momento cuando decide, junto a su padre y SANED, una empresa de catering para escuelas, vender camisetas y recaudar la mayor cantidad posible para poder ayudar a la Asociación Índigo.

Es un proyecto vivo, un proyecto que ha ido creciendo y eolucionando conforme habéis ido aportando vuestro granito de arena. Actualmente se ha centrado en la urgencia de construcción de dos aulas más para la escuela, necesarias para los alumnos que han promocionado a Grade 5 y 6. 

Quizás  no se pueda erradicar de un plumazo todo lo injusto del mundo, todo lo que ha día de hoy está mal. Pero, si participando en este proyecto al menos conseguimos que el mundo y la realidad de 140 niños y niñas que conviven en la Asociación Índigo sea mejor,  entonces el mundo será un poquito mejor y merecerá el esfuerzo. 

¡Gracias!